Un explorador descubre una gruta. Se adentra en ella y ve que se trata de una tumba. Avanza un poco y se encuentra una lámpara. La toma en sus manos, la limpia un poco y, de repente, comienza a salir algo de ella…
¡Un genio! (Qué, si no…)
Ya que está fuera de la lámpara, el genio le dice al explorador:
— Quiero que me digas el nombre de la persona que más odias en este mundo.
— A mi ex-mujer, sin duda. Ésa es la persona que más odio, ¿por qué?
El genio le explicó:
— Porque voy a concederte tres deseos. Pero, para cada cosa que pidas, tu ex-mujer recibirá el doble.
— De acuerdo. -dijo el explorador- Mi primer deseo es tener un millón de euros en el banco.
El genio le concedió su primer deseo.
— Ya tienes el millón de euros y tu mujer tiene dos. ¿El segundo?
— Mi segundo deseo es una gran mansión, con piscina, pista de tenis… ¡de todo!
Y el genio se lo concedió también.
— Ya tienes tu mansión. Tu ex, dos mansiones. ¿Cuál es tu tercer y último deseo?
El explorador se quedó pensando unos minutos. Caminó un poco por la gruta y regresó con un palo en la mano:
— ¿Ves este palo? -le dijo al genio- Quiero que me pegues con él hasta dejarme medio muerto.
Imagen de oblivious-life